jueves, 26 de noviembre de 2015

(T3) ¿Que es ciencia?

La ciencia, esa etiqueta que parece legitimar lo que se considera conocimiento o no, debemos tratarla con sumo cuidado, pues además de ser algo ambigua y hacer referencia a diferentes dimensiones, encierra en si misma una ambivalencia terrible.
La ciencia por un lado podemos entenderla desde lo que se considera como método experimental, o con mas precisión, como método inductivo-deductivo, que sirve para producir nuevos conocimientos o, al menos, garantizar su refutabilidad y que es, o se considera, por así decirlo, el filtro de la verdad. Por decirlo de otro modo, la ciencia se puede entender como la "máquina" de producir conocimientos.
Por otro lado, otra de las dimensiones de la ciencia hace referencia a los recursos puestos a disposición de la producción de saberes nuevos o la ciencia como institución social. Y por último, la ciencia se entiende también como la producción científica en si misma, como el conjunto de conocimientos ciertos o tenidos por ciertos. Por lo tanto la ciencias es método, la ciencia es una institución y la ciencia es stock de conocimiento.
Ahora bien, la ciencia, como producto social que es, pues sin sociedad e individuos que interaccionan no hay ciencia, también debe de volver sobre si misma, en un ejercicio reflexivo, para estudiarse a si misma y comprender no solo las dimensiones que la hacen ser como es, sino también el sentido de su propio ser.
La ciencia, en su origen es un producto moderno, fruto del logro de un grado de pensamiento humano que dejo a tras la explicación teológica de los fenómenos para abrazar la razón como fuente de verdad. Y en sentido, la ciencia se proyecto como camino o vía de progreso, en el que el horizonte constante se planteó como el lograr fases superiores de organización social, emancipación, libertad y justicia. La ciencia no se invento, (si es que es posible inventar el método de inventar) para explicar y describir el universo que nos rodea, la ciencia se proyecto para conseguir avanzar en la mejora constante de las condiciones de vida de las personas, para dominar la naturaleza en la medida de lo posible y hacer nuestras vidas lo mas largas, saludables y felices posibles. Pero algo se trunco en el camino, y ese proyecto moderno que diseñaron aquellos y aquellas que renacieron de la oscuridad de largos siglos de aletargamiento y posteriormente vieron la luz para ilustrar el conocimiento, se topo con la otra cara de la moneda que muchos y muchas no supieron predecir, las consecuencias más pérfidas que jamas pudieron imaginar, Auswitch, Hiroshima, Nagasaki, y un largo etc.. La ciencia y la razón al servicio de unos intereses que no previstos, los de la propia autodestrucción de la humanidad.
Por lo tanto, si queremos definir que es ciencia, debemos ser consciente de que la ciencia no es solo esa parte bonita y buena que nos explica de que esta compuesto el polvo cósmico o como hacen la fotosíntesis las plantas, la ciencia también puede ser una potencial arma que todo lo destruya.
Así las cosas, tengamos cuidado con la ciencia, pues es una arma de doble filo, y sino hacemos bien el trabajo reflexivo de estudiar a la ciencia como un producto social, de los intereses que están detrás y las motivaciones que la empujan, puede que nos reviente en la cara.

miércoles, 18 de noviembre de 2015

(T2) Los todologos

He seleccionado para esta tarea el tuit abajo señalado, pues me ha recordado la etiqueta que usaban algunos de mis compañeros de clase para referirse a esos tertulianos que aparecen tanto en la televisión y que saben de todo, por no decir que todo lo saben. Los todologos. De todo saben y de todo opinan. Pero no solo eso, además creen estar en posesión de la verdad, de esa verdad que se obtiene a través del método científico, algo desconocido para muchos.
Es verdaderamente sorprendente ver a esas tertulias de mediodía donde una serie de personas, normalmente las mismas, hablan y discuten sobre temas tan importante para la sociedad como la política internacional, la guerra o el cambio climático, soltando por la boca aquello que primero les viene ala mente, faltos de cualquier rigor ético o científico. Más que sorprendente es indignante, pues con la influencia que ejercen sobre los y las telespectadores/as y el eco que adquieren sus verborreas, convierten a personas sencillas y bienintencionadas en altavoces de sus estupideces. Cierro esta entrada haciendo referencia a una letra de Evaristo, el cantante de "La polla records":
"Puedes leer tu opinión en la prensa,
y repetirla como un anormal,
puedes correr como un gallo sin cresta,
caraeando, ca, ca, caaaaaaaa"

 15 nov.
Primero tertulia sobre yihadismo; después sobre política catalana; después sobre contaminación. Los mismos tertulianos.

martes, 17 de noviembre de 2015

(T1) La metamorfosis del capitalismo

Mi nombre es Xabier Errea, y el presente Blog representa parte del trabajo que durante el proceso de doctorando llevaré a cabo. Mi tesis se inscribe dentro del Programa de Doctorado en Humanidades y Ciencias Sociales, y trata de responder a la siguiente pregunta ¿Existen hoy en día diferentes variedades o formas de capitalismo en relación a las diferentes civilizaciones del mundo? En ese sentido, parto de la idea de las "modernidades múltiples", a través de la cual nos aventuramos a lanzar la hipótesis de que en ese mismo sentido es posible que existan también "capitalismos múltiples".

Cuando hoy hablamos de capitalismo nos referimos a un sistema económico y social concreto, con su estructura y composición, entendiéndolo como un objeto complejo y de algún modo abstracto. Desde su paulatina emergencia, ha sido objeto de estudio y debate por los más grandes economicistas, sociólogos, filósofos, historiadores y tantas otras disciplinas podamos nombrar, pues como sistema que es, su influencia se ha ido colando por todo el complejo del que se componen las sociedades. Sobre su origen y sobre su Historia se ha discutido mucho durante los siglos XIX y XX, se sigue haciendo durante el presente, y otro tanto se ha hecho sobre su futuro. Los grandes clásicos, Karl Marx, Max Weber, Emilie Durkheim o Georg Simmel, por nombrar algunos de ellos, plantearon sus teorías y formulaciones sobre hacia donde discurrirían los derroteros de la historia, y en la mayoría de los casos, el capitalismo estaba abocado a una aspiración universal, a su mundialización, fuese para su posterior destrucción o su perpetuidad, pero todos o la mayoría de ellos compartían esa premisa, la de su mundialización.

Hoy, desde la segunda década del siglo XXI, con la perspectiva histórica que eso nos proporciona, podemos volver la mirada hacia aquellos postulados que los gigantes formularon, para de algún modo seguir contribuyendo al legado que ellos nos dejaron, el del conocimiento, y en ese sentido, revisar y replantear si fuese necesario aquellas ideas que lo precisen. De este modo, si tanto la mayoría los teóricos del siglo XIX como los del siglo XX, hablaban del capitalismo como un sistema, hoy es posible que esa definición o conceptualización este sea revisable o pertinente de matices, pues como la realidad de hoy nos sugiere, es posible que no sea correcto de hablar de una única forma de capitalismo.